lunes, 6 de junio de 2011

Adiccion a la television

¿Qué es eso?
Es conocido que la persona promedio pasa aproximadamente tres horas al día sentada frente al aparato de televisión, lo cual representa la mitad de su tiempo libre. Y es conocido que televidentes asiduos reportan ver televisión ocho horas al día. La pregunta es: “¿Son estas personas adictas a la televisión?”

Primero, definamos una adicción. Se dice que una adicción se presenta cuando una persona pasa usualmente una gran cantidad de tiempo usando una sustancia que es adictiva; cuando esta persona la utiliza más a menudo de lo que debería; cuando piensa reducir el uso y realiza repetidos y poco exitosos intentos por hacerlo; cuando renuncia a actividades sociales con el fin de usar la sustancia y cuando reporta síntomas de abstinencia al detener su uso.

La televisión puede enseñar y entretener y está claro que provee la distracción y el escape que todos necesitamos. Sin embargo, la dificultad surge cuando uno siente fuertemente la necesidad de ver tanta televisión y aun así, no es capaz de reducirla. 


¿Cuáles son los Efectos?
En 1997, setecientos niños japoneses fueron llevados con urgencia al hospital para ser tratados de ataques epilépticos. Más adelante, estos ataques fueron atribuidos a un programa que estaba siendo transmitido y que involucraba una exagerada versión del juego de Pokémon, el cual contiene luces coloridas intermitentes. Se han realizado experimentos de laboratorio1 para estudiar las reacciones de la gente ante la televisión, monitoreando las ondas cerebrales a través del uso del electroencefalograma. Aquellos que participaron en el estudio, llevaban un buscapersonas (beeper). Se les enviaba una señal de seis a siete veces al día, de manera aleatoria, por una semana. Cuando escuchaban el “bip”, tenían que escribir lo que estaban haciendo y cómo se estaban sintiendo. Cuando recibían la señal, quienes estaban viendo la televisión, decían sentirse relajados y pasivos. Tomando como referencia la producción de las ondas cerebrales alfa, los estudios mostraron menos estimulación mental cuando veían la televisión, que cuando estos participantes estaban leyendo. Luego de que se apagaba el aparato de televisión, el estudio mostró que los participantes seguían sintiéndose relajados y pasivos, como si toda su energía se hubiera ido.

Esto sugiere1 que ver televisión tiene un efecto adormecedor y que actúa ante el cuerpo como un tranquilizante. Se presenta somnolencia y es posible que incluso se llegue a experimentar depresión al continuar viendo televisión. Una persona en realidad se desconecta de la vida real y se sumerge en lo que se está mostrando en la pantalla, lo cual, a su vez, provoca un exceso de atención, más de lo que se había previsto al inicio. 
  • Lleva un registro de cuánta televisión ves y cuándo la ves. Hazlo por una semana.
  • Registra todas las demás actividades divertidas que puedas hacer en casa, en lugar de ver televisión. Coloca tu lista en el refrigerador y revísala ANTES de encender tu TV. Toma en cuenta las cosas divertidas por hacer en familia, proyectos familiares pendientes, actividades al aire libre, lectura, ejercicio, etc.
  • Establece un límite para la cantidad de televisión que verás en una semana. Registra el tiempo y mantén tu compromiso.
  • Comprométete a ejercitarte cuando veas TV, podrías hacerlo en una caminadora, en una bicicleta estacionaria, etc.
  • Piensa en retirar tu aparato televisor por un tiempo determinado. Es posible que te encuentres hablando con tu familia una vez más, en lugar de ver tanta TV.

Cómo Evitarlo
¿Hay esperanza para aquellos que padecen adicción a la televisión? Sí, comienza aquí.
  • Lleva un registro de cuánta televisión ves y cuándo la ves. Hazlo por una semana.
  • Registra todas las demás actividades divertidas que puedas hacer en casa, en lugar de ver televisión. Coloca tu lista en el refrigerador y revísala ANTES de encender tu TV. Toma en cuenta las cosas divertidas por hacer en familia, proyectos familiares pendientes, actividades al aire libre, lectura, ejercicio, etc.
  • Establece un límite para la cantidad de televisión que verás en una semana. Registra el tiempo y mantén tu compromiso.
  • Comprométete a ejercitarte cuando veas TV, podrías hacerlo en una caminadora, en una bicicleta estacionaria, etc.
  • Piensa en retirar tu aparato televisor por un tiempo determinado. Es posible que te encuentres hablando con tu familia una vez más, en lugar de ver tanta TV.